El universo a simple vista no es negro ni azul oscuro como nos lo podemos imaginar o como lo coloreamos en un dibujo,
todo lo contrario, es un deslumbrante mundo de color que cambia según lo que podamos descubrir en ese momento con
un telescopio o prismáticos para la ocasión. Cuando observamos por encima de nuestras cabezas buscando la estrella
polar o la osa mayor, la galaxia está llena de cúmulos estelares brillantes, nebulosas (nubes de gas y polvo donde
nacen y mueren cada día miles de millones de estrellas), las cuales dependiendo de qué elementos estén compuestas
tendrán un color u otro, cuando unimos todo eso, ¡¡BOOM!! Preciosos colores inundan nuestras pupilas, rosa, amarillo,
azul, violeta. Vamos a intentar recrearlo mediante un experimento que se llama arco iris redox, ¡vamos!
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